viernes, 15 de septiembre de 2023

Artrosis de rodilla, tratamiento con Microfracturas

Las microperforaciones, también conocidas como microfracturas, son una técnica quirúrgica utilizada en el tratamiento de la artrosis de rodilla y otras lesiones condrales. Esta técnica se desarrolló para estimular la formación de nuevo cartílago en áreas dañadas de la articulación de la rodilla. Aquí hay una descripción básica de cómo funciona:
1. Preparación: El cirujano ortopédico realiza una artroscopia de la rodilla para acceder a la articulación de forma mínimamente invasiva. Esto implica hacer pequeñas incisiones y utilizar un pequeño dispositivo de cámara (artroscopio) para visualizar el interior de la rodilla.

2. Identificación de la lesión: Se identifica la ubicación precisa de la lesión condral o de la artrosis en la superficie de la articulación de la rodilla.
3. Microperforaciones: Usando instrumentos especializados, el cirujano crea múltiples microperforaciones o microfracturas en el hueso subyacente debajo de la lesión. Estas perforaciones pueden variar en tamaño y profundidad.
4. Estímulo de la curación: Las microperforaciones permiten que la médula ósea y las células sanguíneas entren en la lesión. Estas células pueden ayudar a estimular el crecimiento de nuevo cartílago en la zona dañada.

5. Rehabilitación: Después de la cirugía, se requiere un período de rehabilitación, que generalmente incluye terapia física para fortalecer los músculos circundantes y promover la curación adecuada del cartílago.
La microperforación es una opción de tratamiento adecuada para pacientes con lesiones condrales pequeñas o áreas de artrosis localizadas. Es menos invasiva que algunos otros procedimientos y puede tener menos tiempo de recuperación. Sin embargo, es importante destacar que la calidad del nuevo cartílago formado mediante esta técnica puede variar, y en algunos casos, puede requerirse un seguimiento adicional o procedimientos adicionales si el cartílago no se regenera adecuadamente.

Como siempre, el tratamiento adecuado para la artrosis de rodilla debe ser determinado por un ortopedista o cirujano especializado en función de la evaluación individual del paciente y la gravedad de la lesión.

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